viernes, 19 de octubre de 2012

¿Qué hacer cuando sientes que tu vida podría ser de otra manera? Es más, ¿qué hacer cuando, además, sientes que es posible cambiarla? Pues eso es precisamente lo que debes hacer. Siempre se encuentran mil excusas para no empezar, pero también existe un momento en el que estas, ya no sirven de nada, en el que descubres que si no empiezas a buscar tu "LEYENDA PERSONAL", jamás conseguirás ser del todo feliz.

Leer "El Alquimista" de Coelho probablemente ha sido la mejor idea y la peor que he tomado en mi vida... He leído muchos libros y cuando he terminado algunos de ellos he sentido satisfacción y hasta he pensado "sí, lo que acabo de leer me ha marcado" pero nada comparable con este.
He de admitir que, en gran medida, hice la maleta por su culpa y que de vez en cuando releo algunas páginas para que no se me olviden los motivos. Y es que esto de seguir señales es un poco peligroso porque puede que te haga cometer alguna que otra locura... y qué? ¿Para que estamos aquí si no es para vivir?

El comienzo no es NADA sencillo cuando, encima, decides empezar sola. Tu familia, tus amigos, tu casa, tus bares, tus cervezas... todo te parece que está a años luz de distancia y a cada momento piensas que si algún día vuelves nada será como antes. Y probablemente no lo sea porque tus propias vivencias te habrán cambiado. Lo que no cambiarán son los abrazos que te recibirán cuando vuelvas de visita, las sonrisas, las cervezas, las conversaciones... La gente importante, la de verdad, no se va a ningún lado.
Una vez alguien me dijo que la amistad era algo circunstancial y esto me hizo pensar y llegar a la conclusión de que sí, conoces a gente importante en ciertas circunstancias, pero justamente estas son las que hacen que algunos ocupen un lugar importante en tu vida. Todavía no sé si estoy o no de acuerdo con esa persona! :)

Por cierto, Innsbruck precioso. Es un lugar increíble para vivir y por eso es una lástima en parte que sea la primera parada. Algo me dice que un poco antes del verano ya estaré buscando un segundo lugar...




Desde hace dos meses (justo cuando empezó mi viaje) no me separo de una libreta donde decidí escribir las cosas que me iban a suceder en la aventura que emprendía. Sin nombres, solo describiendo situaciones, sentimientos, anécdotas... como una manera de recopilar las vivencias que uno tiene y que necesita plasmar en algún lugar concreto. 
Ayer decidí que si las escribo en esa libreta solo yo podría disfrutar, enfadarme, reír o llorar con ellas y no le encontré mucho sentido. La vida es compartir! Y compartir con la gente que te importa, y más cuando están lejos, es un privilegio que no tiene sentido desperdiciar. 
Habrá gente a la que no le parezca bien que la gente escriba sobre sí misma de una manera pública, habrá gente a la que le alegre leerme de vez en cuando y habrá otra gente que, simplemente, no le dará la más mínima importancia. Yo me siento bien haciéndolo y, obviamente, habrán partes personales que comparta solo con la gente que crea necesario, con mi gente. 
Podéis opinar, dar vuestro punto de vista, leerme sin decir nada o directamente no leerme porque no por ello dejaré de expresar cosas y plantear preguntas sin importar del tipo que sean...

Ahora sí, empieza la aventura.